sábado, 2 de julio de 2016

Shabat | Jabad

Shabat | Jabad












¿Qué es el shabat?






Iluminemos el mundo


Dejemos entrar la luz del Shabat


Algunas leyes


Una mitzva por si sola


Guardad y recordad


Shabat: Un día de espiritualidad y devoción


Erev Shabat – Víspera de Shabat


Encendido de velas


Kabalat Shabat-Dando la bienvenida al Shabat


Shalom Aleijem, Malajei Hasharet – La paz esté con vosotros, ángeles de la paz


Mujer virtuosa – Eshet Jail


Kidush – Santificación


Netilat Iadaim y Hamotzi


La Cena de la Noche del Shabat


Shajarit de Shabat


La lectura de la Torá


Mi Sheberaj – Aquel que bendijo


Maftir y haftará


Oración de Musaf de Shabat


Kidush- la comida del día de Shabat


Shabat de tarde


Oración de Minjá y la Seudá Shlishit – tercera comida


Maariv después de la salida de Shabat


Havdalá – Distinción


Kidush levaná – Santificación de la luna nueva


Melavé malka – Escoltando a la reina Shabat.


Subestimación


Behar-Bejukotai -”La profecía sobre el exilio y redención”








Iluminemos el mundo
A partir de este viernes, y así todas las semanas, miles de mujeres judías, desde Ushuaia hasta La Quiaca, renovarán la tradición de iluminar el hogar judío encendiendo las velas de Shabat antes de la puesta del sol.



Encender las velas del Shabat es uno de los preceptos más significativos entregados a las mujeres y niñas judías.



El Rebe de Lubavitch, Rabí Menajem Mendl
Schneerson, nos enseña que “una sola vela ilumina lo que está oculto por
la oscuridad. Cuando enciende las velas de Shabat una mujer revela la energía Divina presente en su alma, hogar, y en toda la Creación”.



El momento que estamos viviendo, requiere de una bendición
Divina especial. En Israel, la situación de nuestros hermanos es muy
grave –Di-s proteja a todos-. En Argentina, la situación económica,
social, etc., también requiere de una intensa ayuda del cielo.



Sin lugar a dudas, tal como lo prescriben nuestros Sabios, el aumentar el cumplimiento de las mitzvot, y en especial el encendido de las velas de Shabat, aportará para invocar la luz y bendición Divina que necesitamos.



Todos juntos lograremos iluminar el mundo, a Israel y a la
Argentina, con bendición, paz y prosperidad hasta la llegada del
Mashiaj.



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Dejemos entrar la luz del Shabat
CONCEDETE UN MOMENTO PARA TI Y TU ALMA



La vida, hoy, es una constante y agobiante carrera.



Tú estudias o trabajas duro toda la semana, diriges un hogar, crias a tus hijos, etc.



Los días se acumulan, se convierten en meses y así los años van pasando.



Debemos saber detenernos un instante y tomarnos un respiro para pensar también en nuestras almas.



Una vez a la semana tienes esta oportunidad, el momento del encendido de las velas de Shabat.



Este es un precepto de la mujer judía. Es la unión de tu familia con la tradición judía.
Tu unión con las maravillosas mujeres judías de todas las épocas, las
cuales todos los viernes encendían las velas, tapaban sus ojos,
realizaban sus plegarias y se tomaban ese respiro para su alma.



Deja entrar tu también esta maravillosa, milenaria y sagrada luz a tu hogar y a tu familia. Enciende las velas de Shabat.



Tal como se encienden las velas en honor al Shabat, de la misma manera se lo hace en honor a las Festividades. Cada Festividad tiene su propia Bendición.



Algunas leyes
Aún una niña, a partir de los tres años en adelante, debe encender sus velas de Shabat y Iom Tov.



Las mujeres casadas encienden dos velas, las solteras sólo una.



Primero enciende la niña, y luego su madre.



Es costumbre poner unas monedas para caridad (tzedaká) antes del encendido.



Es conveniente que las velas de Shabat y Iom Tov estén sobre la mesa en la que se llevará a cabo la cena.



Es muy importante tener cuidado con el horario de encendido de las
velas. No deben encenderse las velas del Shabat, si pasaron 15 minutos
del horario indicado, ya que de esta forma se profana el Shabat. Por
ello es preferible no encenderlas si pasó el horario y se deberá tener
mucho cuidado para que esto no vuelva a ocurrir.



Primero se encienden las velas, luego se tapan los ojos con las palmas de las manos y se recita la Bendición correspondiente.



Barúj ata A-do-nái E-lo-héinu mélej haolámashér kidshánu bemitzvotáv vetzivánu lehadlik ner shel Shabat Kodesh.



Bendito eres Tú, Di-s, nuestro Señor, Rey del Universo, Quien
nos santificó con Sus preceptos y nos ordenó encender las velas del
sagrado Shabat



Una mitzva por si sola
El valor de esta Mitzvá (Precepto)
tiene total vigencia, aún cuando tú no observes todavía los demás
Preceptos del Shabat, y este hecho no debe ser un impedimento para que
tú enciendas las velas del Shabat y Iom Tov.



Por el contrario, tal vez por medio de esta hermosa Mitzvá podrás
sentir el sabor especial del Shabat que te facilitará su observancia.



Todos los Viernes, 18 minutos antes de la puesta del sol, enciende
las Velas de Shabat, poné tus manos alrededor de las llamas y hace tres
movimientos en forma circular, luego cúbrete los ojos y recita la
siguiente bendición:



Barúj atá A-do-nái E-lo-héinu mélej haolám ashér kidshánu bemitzvotáv vetzivánu lehadlik ner shel Shabat Kodesh.




Bendito eres Tú, Di-s, nuestro Señor, Rey del Universo, Quien
nos santificó con Sus preceptos y nos ordenó encender las velas del
sagrado Shabat.



Guardad y recordad
Shabat aparece en los Diez Mandamientos:
"Porque en seis días hizo H' al cielo, la tierra, el mar y todo lo que
hay en ellos y descansó el día séptimo; por eso bendijo el día Shabat y
lo santificó" (Éxodo 20:11).



Esta argumentación, que se basa en el relato de la creación del
mundo "Y habiendo terminado D's el día séptimo la obra que había
hecho... y bendijo D's el séptimo día y lo santificó..." (Génesis 2:3),
enfatiza la esencia del Shabat: al respetarlo se atestigua la Creación divina del mundo. El Shabat es de alguna manera, "el recuerdo de la Creación" y es la piedra fundamental de la fe monoteísta,



El Shabat es también "recuerdo de la salida de Egipto".
En los Diez Mandamientos leemos: "Acuérdate de que fuiste siervo en la
tierra de Egipto y que H' tu D's te sacó de allí con mano poderosa y
tenso brazo.  Por consiguiente, H' tu D's, te ordena que guardes el día
Shabat" (Deuteronomio 5:15): el Shabat no sólo tiene un valor universal,
también tiene un valor nacional de primer grado.



La transición semanal de lo profano a lo sagrado,
del trabajo al descanso, es similar al pasaje de la esclavitud a la
libertad, como les ocurrió a nuestros antepasados cuando salieron de
Egipto.  La finalidad del Shabat es darnos la sensación que la historia
se repite: el milagro de la salida de Egipto, de la redención, de la salida de la oscuridad a la luz y de la esclavitud a la libertad.



Shabat: Un día de espiritualidad y devoción
Durante el día estamos ocupados y preocupados y a la noche cada
uno emplea el tiempo libre en lo que le agrada: ver televisión, hacer
tareas domésticas, salir; y aquellos que están fatigados, a acostarse a
dormir temprano. El encuentro entre los miembros de la familia, si
existiera, es ocasional.



Parte de las crisis que existen en la vida de muchas familias  entre
padres e hijos, se podrían evitar si encontraran la manera de hablar
abiertamente en la búsqueda de un común denominador y de entendimiento,
estableciendo una verdadera comunicación. También aquí el Shabat brinda
su aporte: un día en la semana no hay trabajo, no hay que preparar
tareas, no hay salidas escapándose de la casa ni existe la televisión;
no hay trabajos pendientes, ni la pregunta "¿A dónde vamos hoy por la
noche?": toda la familia está alrededor de la mesa del Shabat. Con las
velas, el mantel extendido, la mesa festiva servida, el kidush, las zemirot - cánticos e himnos de Shabat -, unas palabras de Torá, una
cita, un relato, una reflexión, una enseñanza, el ambiente es Shabat
que se respira por todos los poros, se huele, se siente. Los miembros de
la familia abren su corazón y dialogan espontáneamente acerca de los
sucesos semanales. La cultura de la conversación se desarrolla alrededor
de la mesa. Podemos escuchar y hacernos escuchar unos a otros,
profundizar todos los temas con personas ajenas, nuestros anfitriones y
descubrir nuevos y sorprendentes ángulos que no conocíamos en las
personas que tenemos cerca. Estas revelaciones rompen la monotonía y la
rutina y otorgan a la vida una perspectiva sorprendente y refrescante.



Erev Shabat – Víspera de Shabat
Preparativos para Shabat:



"El sexto día, cuando preparen lo que van a llevar" (Éxodol6:5).
Fuimos ordenados a aprontarnos para Shabat y preparar todo aquello que
necesitemos antes de su comienzo.



Debemos recordar que erev Shabat es el
sexto día, con la llegada de la noche deja de ser vísperas de Shabat y
pasa a ser noche del Shabat propiamente dicha. En la mayoría absoluta de
las naciones y las culturas, el día cambia a la medianoche, pero para
el judaísmo el nuevo día nace con la llegada de la noche: "y hubo tarde y
hubo mañana: Un día" (Génesis 1:5). El comienzo del día se produce al inicio del anochecer y comprende la noche y toda la jornada hasta el nuevo ocaso del sol.



En el libro de Éxodo 16:5 se basa en el episodio del maná que nuestros antepasados comieron en el desierto. Cada mañana salían a recolectar la medida de un omer (como de dos kilos por individuo) Para no tener que buscar comida para Shabat, el sexto día caía lejem mishné - pan doble - dos omarim y
de esta manera recibían en la víspera también la porción que irían a
consumir en Shabat. De aquí aprendemos la importancia de hacer los
preparativos para Shabat.



Para honrar el shabat la halajá (ley judía) nos obliga a prepararnos: bañamos, peinarnos, cortarnos las uñas, vestirnos con prendas agradables y especiales. La casa
deberá brillar, la mesa puesta con el mantel y los utensilios más
bonitos y cada familia, según sus posibilidades, deberá honrar la mesa
con comidas adecuadas y especiales más que los otros días de la semana:
"Y llamarás al Shabat placer" (Isaías 58:13), es el mandato para el que tenemos que laborar.



Encendido de velas
El hogar judío recibe al Shabat con el encendido de velas y este precepto pertenece a la mujer. Se
deben encender las velas media hora antes del ocaso y por eso se deben
observar los horarios del encendido que difieren de ciudad en ciudad.



El encendido de velas es uno de los tres preceptos específicos de la mujer. Si la mujer no se encuentra en la casa, el esposo u otro miembro de la familia debe prender las velas en su lugar.



Este precepto es específico de la mujer por el motivo que la mujer
se encuentra en el hogar relativamente más tiempo. Otra razón se refiere
al Shalom Bait - la armonía en el seno del hogar -. Nuestros sabios desearon enaltecer a la mujer, pilar del hogar y por ello le adjudicaron el honor de traer la santidad del Shabat a la casa.



Nuestros sabios también aportaron otro motivo: el encendido de las velas es una especie de reparación y expiación del pecado de Eva, la madre de todas las criaturas, que comió del árbol prohibido de la sabiduría y, además, alimentó con esos frutos a Adán.



¿Cuál es la relación entre el pecado original y el encendido de velas?



Como resultado de este pecado fue dicho "del polvo vienes y al polvo
retornarás". Es decir, con el hecho de haber comido del árbol de la
sabiduría Java, apagó la "luz del mundo" (como dice el versículo: "la
luz de D's es el alma del hombre" en Proverbios 20:27) y por el hecho de
haberla apagado, expía cada víspera de Shabat su falta, con el
encendido de velas.



¿Cuantas velas se deben encender?



Contamos con dos costumbres principales acerca de la cantidad de
velas, que se deben encender en la víspera de Shabat: la. Dos velas -
una por "Recordad" y otra por "Cuidad"- son los dos conceptos que complementan la santidad de Shabat.



Una mujer casada habitualmente enciende dos velas y puede agregar
una adicional por cada uno de sus hijos. Las mujeres solteras encienden
una vela.

En cuanto una niña pueda captar la idea de Shabat puede recitar la
bendición (aproximadamente 3 años de edad), su madre debe proporcionarle
un candelabro y debe enseñarle a encender las velas de Shabat.

Las niñas deben encender antes que su madre en caso de que necesiten de su ayuda. Es costumbre poner unas monedas en una "pushke" (alcancía para Tzedaká)



La bendición de las velas en Shabat es pronunciada
luego de ser realizada, es decir, después del encendido. Porque con la
pronunciación de la bendición. , la ama de casa recibió al   Shabat.  
Desde   ese   momento   en   adelante   todas las prohibiciones de
labores de Shabat recaen sobre ella - y una es la prohibición de encender fuego.
Es por eso que primero deberá encender las velas y sólo después
bendecir. De aquí nace la costumbre de cubrirse el rostro con las manos
en el momento   de  pronunciar   la  bendición  y  mirar  las velas
encendidas sólo al acabarla, ya que de esta manera cumplieron con el
precepto  como si  hubiera sido pronunciada antes del encendido.



Bendición:



Barúj ata A-do-nái E-lo-héinu mélej haolámashér kidshánu bemitzvotáv vetzivánu lehadlik ner shel Shabat Kodesh.



Bendito eres Tú, Di-s, nuestro Señor, Rey del Universo,
Quien nos santificó con Sus preceptos y nos ordenó encender las velas
del sagrado Shabat



Kabalat Shabat-Dando la bienvenida al Shabat
Después del encendido de velas los miembros de la familia van la sinagoga para las oraciones de minjá, Kabalat Shabat y mariv de Shabat.



Seis capítulos de Salmos dan comienzo al Kabalat Shabat en la mayoría de los rituales, cantidad que representa a  los días de la Creación. Al concluir los seis capítulos se dice leja dodi likrat cala, penei Shabat nekablá - Ven
mi bien amado, al encuentro de la novia,  el  Shabat está llegando,
vamos a recibirlo - que fue compuesto por Rabí Shlomó Alkabetz. El
último párrafo,   Boi Beshalom bienvenida seas -, se dice de
pie y girando los cuerpos y los rostros hacia la entrada de la sinagoga
(casi siempre para el lado oeste, opuesto al arón hakodesh - arca sagrada - que se encuentra en el este), como si esperáramos la llegada de la novia, que es la reina de Shabat.



El Kabalat Shabat culmina con dos salmos: el 92 - mizmor shir leiom hashabat - salmo y cántico para el día de Shabat- y  el 93 -  H' malaj gueut lavesh  - el Eterno rey está vestido de Majestad - Luego: kadish iatom.



En arvit: shemá y sus respectivas bendiciones y el final de  hashkivenu luego de que el oficiante recita el kadish, se lee la amida, compuesta
por siete bendiciones en lugar de las diecinueve de los días de la
semana. Las tres primeras bendiciones y las tres últimas son iguales a
las de todos los días, pero en el centro se encuentra una bendición
especial, que resume el contenido del Shabat. Esta bendición difiere en
cada una de las cuatro oraciones de amida que se recitan en Shabat (en arvit, shajarit, musaf y minja). La
bendición central en la oración de la noche de Shabat está consagrada a
la idea que el Shabat es un testimonio de la creación del mundo por
manos de D's.



Luego de la amida el oficiante y la congregación dicen
juntos, en voz alta y de pie, los tres versículos "y así fueron acabados
el cielo y la tierra", etc., con estos versículos testimoniamos que D's
creó el mundo en seis días de creación, "Él y no otro". Según la Tora un testimonio se presta de pie y no tiene valor el testimonio de uno solo, entonces toda la congregación junta y de pie confirma su veracidad.



Tan pronto como el oficiante recita una corta bendición que evoca a nuestros patriarcas, la congregación dice: Maguen avot bidvaró -protector de nuestros antepasados por Su verbo-, que resume las siete bendiciones, que fueron ya dichas en silencio en la amida y el oficiante la repite en voz alta.



Después de que el oficiante recita kadish titkabel se acostumbra a decir el capítulo 23 de Salmos. Luego el oficiante dice jatzí kadish y repite Barjú et H' hamevoraj - bendecid al Eterno que es bendito- y la congregación responde: Baruj H' hamevoraj leolam vaed - Bendito sea el Eterno, que es bendito siempre.



Al pronunciar la oración de aleinu leshabeaj - es nuestro deber alabar a D's - y kadish iatom concluye la oración de arvit de Shabat.



Shalom Aleijem, Malajei Hasharet – La paz esté con vosotros, ángeles de la paz
En la comida de la noche del Shabat, la
familia y los invitados se sientan alrededor de la mesa (es una
costumbre antigua y muy valiosa ser hospitalarios e invitar a los
necesitados a compartir la mesa festiva de manera que nadie quede
excluido).



Los comensales comienzan a cantar shalom aleijem, malajei hasharet - la
paz esté con vosotros, ángeles de la paz compuesta por cuatro estrofas,
cada una de las cuales se repite tres veces. Este cántico está basado
en la leyenda del Talmud según la que en la noche del Shabat cada
persona regresa de la sinagoga acompañado por dos ángeles: uno bueno y
el otro malo. Cuando los dos encuentran la casa preparada para Shabat,
el ángel bueno desea que "el Shabat entrante sea así" y el malo debe
obligatoriamente responder amén. Si de lo contrario, no se encuentra la
santidad del Shabat, el ángel desea "que el Shabat venidero también sea
así" y el ángel bueno no tiene otra alternativa que responder amén. 
Después de cantar shalom aleijem el padre de familia recita: Ribón col haolamim, adon col haneshamot, adon hashalom - Amo de todos los mundos, Señor de todas las almas, dueño de la paz -.



Shalom aleijem malajei ha-shareit malajei elyon, mi-melej maljei ha-melajim Ha-Kadosh Baruj Hu. (Se entona tres veces)



Bo'ajem le-shalom malajei ha-shalom malajei elyon, mi-melej maljei ha-melajim Ha-Kadosh Baruj Hu. (Se entona tres veces)



Barjuni le-shalom malajei ha-shalom malajei elyon, mi-melej maljei ha-melajim Ha-Kadosh Baruj Hu. (Se entona tres veces)



Tzeit'jem le-shalom malajei ha-shalom malajei elyon, mi-melej malajei ha-melachim Ha-Kadosh Baruj Hu. (Se entona tres veces)



Traducción:



La Paz sea con vosotros, Ángeles Ministros, mensajeros del Altísimo,
del Supremo Rey de reyes, el Santo, bendito sea
Él.                      (Se entona tres veces)



Que vuestra venida sea en la Paz, Ángeles de la Paz, mensajeros del Altísimo, del supremo Rey de reyes, el Santo, bendito sea.

(Se entona tres veces)



Bendecidme con la Paz, Ángeles de la Paz, mensajeros del Altísimo, del supremo Rey de reyes, el Santo, bendito sea.

(Se entona tres veces)



Que vuestra partida sea en la Paz, Ángeles de la Paz. Mensajeros del Altísimo, del supremo Rey de reyes, el Santo, bendito sea.

(Se recita tres veces)



Mujer virtuosa – Eshet Jail
Al concluir el Shalom aleijem entonamos la melodía del Eshet Jail -mujer virtuosa-



Este cántico que está compuesto en forma de acróstico abecedario, alaba a la mujer.
Su aporte educativo es muy significativo, ya que es parte del
reconocimiento que los miembros de la familia deben rendir a la mujer
que se esforzó con todas las tareas y trabajos que debe realizar durante
toda la semana y por sus esfuerzos especiales de la víspera para
preparar la casa en honor al Shabat.



Eshet jail mi imtza verajok mepeninim mijrah. Bataj bah leb
balah veshalal lo iejsar. Guemaltehu tob velo ra kol ieme jaiea. Daresha
tsemer ufishtim vataas vejefets kapea. Haieta kaoniot sojer mimerjak
tabi lajmah. Vatakom veod laila vatiten teref lebetáh vejok lenaarotea.
Zamema sade vatikajehu miperi japea natea karem. Jogra beoz motnea
vateametz zerootea. Taama ki tob sajráh lo ijbe balaila nerah. Iadea
shileja bakishor vejapea tamju falej. Kapah parsa leani veiadea shileja
laebion. Lo tira lebetah mishaleg ki jol betah lebush shanim. Marbadim
asta lah shesh veargaman lebushah. Noda bashearim balah beshibto im
zikne aretz. Sadin asta vatimkor vajagor natena lakenaani. Oz vehadar
lebushah vatisjak leiom ajaron. Pia patja bejojma vetorat jesed al
leshonah. Tzofia alijot betah velejem atzlut lo tojel. Kamu banea
vaiasherua balah vaialelah. Rabot banot asu jail veat alit al culana.
Sheker hajen vehebel haiofi isha irat A-do-nai hi tithalal. Tenu lah
miperi iadea vihalelu bashearim maasea.




A una mujer virtuosa, ¿quién puede hallar? Es más preciosa que
las perlas. El corazón de su esposo confía en ella; nada le faltará a
él. Ella le prodiga el bien y no el mal, todos los días de su vida. Ella
se procura la lana y el lino, con gusto hace las labores de sus manos.
Se asemeja a nave de mercaderes, que desde lejos buscan su sustento. Se
levanta cuando aún es de noche, proporciona sustento para su familia y
alimento a sus mozas. Lo pensó y compró un campo, con el fruto de su
trabajo plantó una vid. La fortaleza es su ceñido, el esfuerzo dirige
sus brazos. Percibe que su labor es compensadora, entonces ni de noche
apaga su luz. La rueca ocupa sus manos, con ellas maneja el huso.
Extiende su mano hacia el pobre, sus manos abre al menesteroso. Su casa
no teme al frío de la nieve, pues toda su familia esta vestida de grana.
Ella hace sus tapices, sus vestidos son de lino y púrpura. Renombrado
es su esposo en la ciudad cuando se sienta entre los ancianos del lugar.
Teje una tela y la vende, un ceñidor vende al mercader. La fuerza y la
dignidad son su ropaje. Mira con confianza el porvenir. Abre su boca con
sabiduría. En su lengua esta la ley de la bondad. Vela siempre por la
marcha de su hogar, y no come el pan de la pereza. Sus hijos crecen y la
hacen feliz. Su esposo también la loa: "muchas mozas han procedido con
virtud, mas tú a todas sobrepasaste". Engañosa es la gracia, vana la
bella, pues la mujer temerosa de D"s es digna de elogios, séanle
concedidos los frutos de su trabajo. Puedan sus obras loarla en las
ciudades.



Kidush – Santificación
"Recuerda el séptimo día para santificarlo" nuestros sabios
explicaron:   "recuérdenlo con el vino".   Es   por   eso   que
destacamos el comienzo del Shabat con el  kidush santificación  por medio del vino - y su culminación con havdalá, también con vino.



El kidush de la noche del Shabat se debe realizar con un vaso de vino o jugo de uvas. Sólo en el caso que no podamos conseguir un vino casher de cualquier clase o tengamos prohibido beber vino por razones de salud, es permitido hacer el kidush sobre las dos jalot, que se encuentran sobre la mesa como lejem mishné.



El que recita el kidush debe - y con él todos los que se encuentran en la mesa - estar de pie para decir los versículos de vaijulu. Como
hemos explicado, estos versículos representan testimonio de la creación
del mundo por medio de D's y es por eso que se dicen de pie, como es la
ley para prestar testimonio.



Los miembros de la familia cumplen con la obligación del kidush al oírlo
y responder amén a las dos bendiciones. El que bendice da a todos los
presentes a probar del vino. Hay familias en las que los niños (mayores
de trece años) también bendicen.



La bendición de kidush tiene dos elementos fundamentales: zikaron lemaase bereshit - recuerdo de la creación del mundo-  y zejer leietziat mitzraim - recuerdo de la salida de Egipto. Existe una especie de agradecimiento a D's, que nos eligió para tener el mérito de cuidar el Shabat,
que destaca lo principal del la Creación, su universalidad. Por otra
parte el recuerdo del milagro de la salida de Egipto es nuestra base
nacional, ya que " - porque Tú nos elegiste y   nos santificaste entre
todos los pueblos y tu sagrado Shabat  con amor y agrado nos diste en
herencia -".



Se toma la copa con la mano derecha, y tras recitar el Kidush se
bebe inmediatamente, y se da a probar al resto de los comensales.



Iom hashishi. Vaijulu hashamaim vehaarets vejol tsebaam. Vaijl
E-lo-him baiom hashebii melajto asher asa vaishbot baiom hashebii mikol
melajto asher asa. Vaibarej E-lo-him et iom hashebii vaikadesh oto ki bo
Shabat mikol melajto asher bara E-lo-him laasot.Sabre maranan.




(los comensales responden: lejaim!)



Baruj Ata A-do-nai E-lo-henu Melej haolam bore peri haguefen
(Amen). Baruj Ata A-do-nai E-lo-henu Melej haolam asher kideshanu
bemitsvotav veratsa banu veshabat kodsho veahaba ubratson hinjilanu
zikaron lemaase bereshit tejila lemikrae kodesh zejer litsiat Mitsraim
veShabat kodsheja beahaba ubratson hinjaltanu. Baruj Ata A-do-nai
mekadesh haShabat (Amen).



Netilat Iadaim y Hamotzi
Antes de comer pan, se procede al lavado de manos, Netilat Iadaim. No sólo es una medida higiénica,
sino también una purificación espiritual para comer, concientizándonos
que todos nuestros actos deben tener un fin espiritual. Fue impuesto por
el Rey Salomón para comer los Korbanot -sacrificios- en el Bet HaMikdash -Gran Templo-.
Tras la destrucción de este, los sabios enseñaron a continuar con este
precepto, en señal de espera de la pronta reconstrucción del Templo.



Se toma un recipiente con agua y se vierte tres veces en la mano
derecha, y tres veces en la izquierda, se levantan ambas manos y se dice
la siguiente bendición.



Baruj Ata A-do-nai E-lo-henu Melej haolam asher kideshanu bemitsvotav vetsivanu al netilat iadaim.



Bendito eres Tú, A-do-nai, D"s nuestro, Rey del Universo, que
nos has santificado con Tus preceptos y nos has ordenado el lavado de
manos.




El padre de familia se lava las manos primero y en orden hasta el
más joven de los niños último. El padre de familia retira el cobertor de
las jalot, coloca las manos sobre los panes, indica con el cuchillo el lugar donde va a cortarlo, bendice en voz alta hamotzí y corta la jala en
el lugar indicado. Apoya levemente la primera rodaja de pan en sal y
come de ella. Luego reparte rebanadas a todos los miembros de la
familia. Ellos no están obligados, a bendecir hamotzí, ya que han cumplido con su obligación al escucharla y han contestado amén



¿A qué se debe el lejem mishné?



A que D's proporcionó, shnei omarim - dos medidas de maná - por cada individuo en honor al Shabat.



¿Y por qué acostumbramos a cubrirlas?



Conocemos dos explicaciones: La primera: considerando que el maná estaba "dentro de una especie de caja" y estaba protegido arriba y abajo por rocío celestial, colocamos el lejem mishné sobre un mantel y el cobertor de jalot las cubre. La segunda  explicación   está  relacionada  con   lo   que  hemol estudiado   acerca  de   bircat  hanehenim. Según  
este orden debemos bendecir   primero sobre aquello que está elaborado
con trigo y sólo después, sobre la fruta de la viña  (recordemos que en
el versículo que enumera las siete especies, el trigo aparece antes que
la vid).



Está prohibido probar bocado antes del kidush, es por eso que tapamos las jalot, en un ejemplo educativo muy valioso, para no ofenderlas, y bendecimos sobre el vino pronunciando el kidush, antes que hacerlo sobre las jalot: hamotzí lejem min haaretz . La obligación de lejem mishné recae sobre las tres comidas del Shabat.



La Cena de la Noche del Shabat
Se debe honrar la comida con porciones suculentas de acuerdo a las posibilidades y es preferible incluir comidas de pescado y carne, para cumplir con la obligación "y llamarás al Shabat deleite".
Nuestros sabios han enfatizado comer comidas abundantes, ya que los
alimentos se deciden desde Rosh Hashaná hasta lom Kipur para todo el año
entrante -excluyendo los gastos de dinero que están previstos para el
Shabat, días festivos y también los gastos de estudio de Tora para
los niños, "¡Si agregas - te agregan!". Estos gastos - para las
necesidades del Shabat y educación para los niños – están excluidos 
del  presupuesto  anual  que    fue decidido celestialmente.



Además de las comidas hay que enfatizar especialmente el contenido espiritual del día de dos maneras: con canciones y palabras. Las zemirot de la noche de Shabat, se encuentran en los sidurim y en
compilaciones especiales, son una selección de la poesía litúrgica de
los escritores judíos de la Cabala y de los grandes poetas de la Edad
Media. Cada comunidad tiene sus himnos, su rito y sus melodías.



Entre los platos, se estudian y se discuten las interpretaciones de los fragmentos de la Tora, que se leen esa semana. Es importante también, que los niños participen diciendo y escuchando las palabras de la Tora.



Luego de cantar el Salmo 126: "Cántico de las ascensiones, Cuando
trajo el Eterno a los que volvieron a Sión, éramos como gente que
sueña", se recita el bircat hamazón - Bendición de Gracias por la Comida -. Si se encuentran alrededor de la mesa tres hombres que superan la edad de bar mitzva - trece años -, se debe bendecir con zimún. Sefardíes incluyen* jóvenes desde los 8 años para el zimún.



En Shabat se agrega al bircat hamazón de todos los días el párrafo retzé - que te sea agradable -, que se recita en la tercer bendición, antes del final de uvné lerushalaim ir hakodesh reconstruye Jerusalén la ciudad santa -. También se agrega otro párrafo: Harajaman hu ianjilenu iom shekuló Shabat umenujá lejaiei haolamim - que el Misericordioso nos haga heredar el día que es eternamente Shabat y reposo en la vida eterna -.



Shajarit de Shabat
La oración matinal de Shabat está ordenada de la misma manera que la oración de shajarit de los días de la semana y contiene: birjot hashajar - las bendiciones matinales -, psukei dezimrá - cánticos preliminares -, kriat shemá - la lectura de Shemá y sus bendiciones - y la oración de amida.



Considerando que en Shabat tenemos tiempo y no estamos urgidos por
las ocupaciones mundanas, nuestros sabios agregaron algunos capítulos de
los Salmos a los "cánticos preliminares": el capítulo 19 "los cielos declaran la gloria de D's", algunos "Cantos de la asunción" y el capítulo 136 también llamado halel hagadól - gran alabanza -.



Al concluir los "cánticos preliminares" de los días de semana y antes de finalizar esta sección con la bendición de ishtabaj - será alabado -, se agrega la plegaria conocida como nishmat col jai - todo ser vivo bendecirá tu nombre - por sus primeras palabras.



Después de nishmat por lo general comienza un nuevo jazán en lugar de quien comenzara, el hamatjil.



También aquí se han entrelazado algunos otros textos en la primera bendición anterior a Kriat Shemá, es la bendición del iotzer or uvoréjoshej - que formas la luz y creas la oscuridad.



La   amida de   shajarit sigue  
el   orden   de   las siete bendiciones, pero la central difiere de la
de la víspera.En la repetición del oficiante de la amida se dice la kedushá - santificación.



Luego de la repetición del oficiante y la pronunciación del kadish con titkabel - que las oraciones y súplicas sean recibidas -, se recita el Salmo 92: "cántico al día del sábado". Después, la lectura de la Tora.











La lectura de la Torá
En el capítulo en el que hemos tratado shajarit comentamos sobre el orden de apertura del arca sagrada y la lectura de la Tora de
los días de la semana. En estos días solamente leemos la primera parte
para no retener a la comunidad más de lo debido. En Shabat realizamos la
lectura completa y, además, agregamos un capítulo de los Profetas, la haftará -finalización o despedida -.



Luego de la apertura del Arca Sagrada y la pronunciación de vaiei binsoa - y al darse comienzo al transporte del Arca - en Shabat se agregan los siguientes versículos: ata horeta ladaat... - tu fuiste enseñado (oh Israel) que el Eterno es el verdadero D's y no hay ningún otro fuera de Él -.



Luego de la apertura del Arca y después de haber sacado la Tora, el oficiante dice tres versículos y la congregación repite: Shemá Israel, H' E-lokenu, H' ejad - escucha Israel, H' es nuestro D's, H' es uno -; Ejad hu E-lokenu, gadol adonenu, kadosh shemó - uno es nuestro D's, grande es nuestro Señor, santo es su nombre -; gadlu laH' iti unromema shemó iajdav -engrandeced conmigo al Eterno y conjuntamente enaltezcamos su nombre -. Cuando el oficiante se dirige con la Tora en sus manos desde el Arca Sagrada hasta el estrado, lugar de su lectura, la congregación lo acompaña con cánticos.



El gabay - gobernador o tesorero de la sinagoga - llama por lo menos a siete personas a subir a bendecir la Tora, el primero es el Cohén, el segundo - un Leví y los cinco restantes son "Israel".
Todos los invitados son llamados por sus nombres propios y el de sus
padres. Se debe tratar que los convocados a la lectura de la Torá, sean aquellos que conmemoran los aniversarios de la desaparición de sus seres queridos en Shabat o durante la semana entrante. Hay que tratar de dar una aliá en Shabat, al novio
que va a contraer matrimonio y es una costumbre antigua de arrojarle
desde la galería de las mujeres -dulces y confites, como augurio de una
vida abundante y placentera.



Es obligación, llamar a la Tora a por lo menos siete personas, además del que lee  maftir que es el octavo, quel también es honrado con la lectura de la haftará.



La halajá prohíbe el salir de la sinagoga durante la lectura de la Tora, ya que "abandonar" el recinto en ese instante sería como ofender a la Tora. También está prohibido conversar durante la lectura de la Tora, de la misma manera que en las oraciones. El salmista dijo (Salmos 55:15): asher iajdav namíik sod, bebeit E-lokim nelej beraguesh - "Porque
juntos nos comunicábamos dulces secretos y en la Casa de D's nos
conducíamos con reverencia y respeto", y esas palabras deben ser nuestra
guía.



La lectura de la Torá en Shabat fue instituida por nuestro maestro Moshé,
como lo explica el Talmud de Jerusalén. Y nuestros sabios dicen en
Tanjuma: "El Santo Bendito Sea le dijo al pueblo de Israel: si ustedes
se reúnen cada Shabat en las sinagogas y en las casas de estudio y leen
la Tora y los Profetas. Yo considero como si me hubieran coronado en mi mundo".



Mi Sheberaj – Aquel que bendijo
Hemos visto esta expresión cuando explicamos, que un padre al cual le ha nacido un niño o niña, el Shabat siguiente al parto debe realizar mi sheberaj a la parturienta. Esta bendición se brinda a cada uno de los convocados a la Tora. Ella
le da la posibilidad de bendecir a su familia, los rabinos, los
dirigentes,  los soldados del ejército de Israel y a todas los orantes
de la sinagoga. La bendición es pronunciada por el gabay y durante ella se acostumbra ofrecer una donación,  ya sea para la manutención de la sinagoga o para otro tipo de obras de caridad o beneficencia.



Existe un mi sheberaj especial para un enfermo, en la cual pedimos por su pronta recuperación.



Maftir y haftará
Agregamos una persona más, el octavo, para leer el maftir y la haftará a los siete que han subido a leer la Tora. Para el maftir I se llama indistintamente a un Cohén, a un Leví o a un Israel (también el ajaron último de los que han subido antes del maftir puede ser Cohén, Leví o Israel), los que tienen un  evento especial a cumplir o festejar tendrán preeminencia para ese honor.



Para maftir se deben leer por lo menos los tres últimos versículos del capítulo, que ya fueron leídos para la séptima persona.



Oración de Musaf de Shabat
La oración de Musaf de shabat fue decretada como recuerdo a la ofrenda adicional que se acostumbraba elevar en el Templo Sagrado, como demostración especial de la santidad y especialidad de esos días. Las oraciones de shajarit y minjá son por las ofrendas constantes, que se llevaban cada día en shajarit y al atardecer. En días especiales, en los cuales se ofrendaba uno más en el Templo Sagrado, se agregó en  recordación una oración más que se acostumbra hasta nuestros días.



La oración de musaf está compuesta también por siete bendiciones. La bendición central que culmina con Baruj ata H', mekadesh hashabat - Bendito
seas Tú, H' que santificas al Shabat-, comienza con las palabras:
"estableciste el Shabat, te agradan sus ofrendas". Esta parte de la
oración está compuesta en forma de acróstico alfabético invertido.



En la repetición del oficiante se recita kedushá -santificación - con un texto ampliado.



En el Shabat que coincide con Rosh Jodesh, se cambia el texto por uno en el cual se incluyen las ofrendas de musaf de Shabat y de Rosh Jodesh. La oración comienza con las palabras: ata iatzarta olamjá mikedem - Tú creaste al mundo en los tiempos pasados - y culmina con la bendición Baruj ata H'. mekadesh hashabat veisrael verashei jodashim - Bendito seas, Tú H', que santificaste al Shabat, Israel y el comienzo de los meses -.



Kidush- la comida del día de Shabat



Tras las plegarias, nuevamente pronunciamos la santidad de Shabat sobre una copa llena de vino. El Kidush del día de Shabat sigue un formato similar (aunque más corto) a la versión del viernes por la noche. El Kidush es seguido por la comida del día de Shabat, que del mismo modo comienza con el lavado ritual de las manos y la bendición Hamotzí sobre dos hogazas de jalá, seguida por la deliciosa comida de Shabat, cantos y estudio, y Agradecimiento después de la comida.



Un elemento único de la comida del día de Shabat es el cholent
—un guiso cocinado lentamente (hecho típicamente con carne, papas y
porotos, a pesar que abundan las versiones y variedades) que es ubicado
sobre una pequeña llama cubierta desde antes de Shabat.





Shabat de tarde




Luego de un breve descanso considerado popularmente como muy placentero, debemos consagrar tiempo para el estudio de la Tora. Es recomendable hacerlo en congregación en Shabat a la  tarde por medio de clases y alocuciones. En la Tora encontramos
una asociación respecto a los preceptos de Shabat: "Y   reunió Moshé a
toda la comunidad de Israel y les dijo: estas son las órdenes que me ha
ordenado H' para que se haga lo siguiente. Se podrá trabajar durante
seis días, pero el día séptimo será para ustedes un día sagrado, de
completo reposo en honor a D's" (Éxodo 35:1). De aquí podemos concluir
que todo lo referente a leyes de Shabat y estudio de la Tora se debe realizar en comunidad, en asamblea,   -"La gloria del Rey se encuentra en las multitudes de su pueblo".



Oración de Minjá y la Seudá Shlishit – tercera comida
Minjá comienza con ashrei - bienaventurados los que viven en tu casa - y continúa con   uva letzión goel - y el redentor vendrá a Sión -, selección de versículos de la Biblia. Después que el oficiante recita jatzi kadish y el versículo veani tfilati, se abre el Arcavaihíbinsoa haaron, voiomer Moshe
diciendo: partiendo el Arca, Moshé dijo - y con la oración "Bendito
Seal Tu Nombre, D's del universo, bendita sea Tu corona y bendito el
lugar de Tu morada". Se saca la Tora y se convocan a tres personas - Cohén, Leví e Israel ante quienes se lee la primer parte de la porción de la semana entrante, misma que se leerá también el lunes y jueves próximos.



Después de la lectura de la Tora y de la devolución al Arca, nos ponemos de pié para la amida. La
bendición central comienza resaltando la exclusividad del Eterno y la
particularidad de su pueblo de Israel, que fue elegido por Él mismo para
entregarles la santidad del Shabat y su descanso: 'Tú eres   uno   y  
Tu   nombre   es   uno,   ¿y   quién   es   tan i singularmente único
como tu pueblo Israel en esta tierra?".



Al concluir la repetición del oficiante de la amida se acostumbra recitar tres versículos de Salmos (119:142, 71:19, 36:7) Estos tres versículos son una justificación del juicio divino como baruj daian emet - bendito
juez de la verdad - que se dice para aceptar el veredicto del Santo
Bendito, a pesar de que pueda ser muy difícil, amargo, duro y doloroso.
La tradición de recitar estos tres versículos en minjá de Shabat se debe a que tres de los pilares del judaismo fallecieron en el horario de minjá en Shabat: losef, Moshé y el rey David.



Después de estos versículos el oficiante dice kadish titkabel y la congregación recita aleinu - y se concluye la oración con el kadish de duelo.



Después de minjá se lavan las manos para la Seudá Shlishit, la
tercera comida sabática. Esta comida no es para satisfacer al hambre.
Su cometido es realzar los momentos con el estudio, para acumular
energías espirituales para la semana entrante. Enseñanzas de la Tora, cánticos
que aportan al alma que se eleva y la melancolía,  a medida que  se
hace patente  la penumbra que cae afuera acompañan a esta comida.



Maariv después de la salida de Shabat
Arvit después de la salida del Shabat es igual a la oración de los días de la semana, a excepción de estos cambios: en la oración de shmoná esré, en
el fragmento "Tú dotas al hombre con sabiduría e instruyes a los
mortales la comprensión" se diferencia entre lo sagrado y lo mundano
agregando ató jonantanu - Tú nos dotaste para conocer tu Tora y
nos enseñaste a cumplir los estatutos de Tu voluntad. Hiciste separar
nuestro D's, lo santo de lo profano, la luz de la oscuridad, Israel de
los demás pueblos y el séptimo día de los seis días de trabajo -, etc.



Estos   agregados  se  realizan en la  "bendición de  sabiduría"
como han fijado nuestros sabios ya que si no hay  sabiduría - ¿de dónde
provendrán los criterios de la distinción? Para diferenciar una cosa de
otra necesitamos sabiduría para tener discernimiento adecuado.



A arvit de la salida del Shabat se agregan fragmentos Salmos (90:17 y 91) - sea sobre nosotros la gracia de D's - para invocar protección de lo  que le pueda acaecer negativamente durante la semana que comienza en ese momento.



También se agrega la oración beata Kadesh Yosef tehilot Israel - y
Tú eres santo que moras en las alabanzas de Israel compuesta con varios
versículos de la Biblia, para extender la santidad del Shabat. Cuando
cae en esa misma semana alguna de las festividades mencionadas en la Tora, no se recitan los agregados vihi noam y veatá kadosh. En
muchas congregaciones se acostumbra a agregar partes de oración y
versículos de la Biblia, que comienzan con la bendición de Itzjak a
laacov: "D's te dispense el rocío del cielo y la fertilidad de la
tierra, abundancia de trigo y mosto".



Havdalá – Distinción
De la misma manera que cumplimos, al comenzar el Shabat, el precepto de "recuerda el día del Shabat para santificarlo" bendiciendo sobre el vino, también cumplimos con el precepto de havdalá sobre el vino al concluir el Shabat. La havdalá se
realiza sobre un vaso de vino, pero si no tuviéramos vino, se usa
cualquier otra bebida (jugo de uvas, cerveza blanca, cerveza negra o
te). Se sirve el vaso hasta que se derrame un poco como símbolo de abundancia y se enciende una vela especial, y trenzada, con dos llamas por lo menos. Se prepara un utensilio con especias o clavos de olor y se hace participar a los niños haciéndoles sostener la vela.



Luego de recitar los versículos: "He aquí D's mi salvación, estoy
seguro y no temo" se dicen cuatro bendiciones, de acuerdo con el orden  "iabneh":  iain - vino  -,  besamim -especias -, ner - vela - y havdalá - distinción -. Comenzamos agradeciendo a D's sobre el     vino:     boré  pri haguefen - Creador del fruto de la viña - (si no hubiera vino y se recitara sobre otra bebida, la bendición será: shehacol nihia bidvaró -que todo fue creado con su palabra -). La segunda bendición es la que se hace sobre las especias: boré minei besamim - o boré atzei besamim - que  creaste tipos  de  especias  y plantas aromáticas -.



Esta bendición fue decretada por nuestros sabios para despedir al
alma adicional, que nos acompañó durante el Shabat y nos abandona en
esos momentos - hasta el próximo Shabat.



La tercera bendición es boré meorei haesh - Creador de las luminarias del fuego -. Es una bendición que comienza agradeciendo a H' porque nos otorgó el fuego, fuente de luz y calor.



De acuerdo con la tradición, el Santo Bendito le mostró a Adán el
fuego creado por el roce de dos piedras. Este descubrimiento se produjo a
la salida del primer sábado de la Creación y es por eso que se señala
el momento de la salida del Shabat con la bendición de boré meorei haesh
"No se debe bendecir por la luz - hasta que se tenga un provecho de
ella", es decir: debemos bendecir la utilidad producida por el fuego -
la luz y el calor y para ello debemos acercarnos a él. Por eso, se
acostumbra acercar la punta de los dedos a las llamas del fuego:
enfatizando la importancia de la luz, gracias a la cual podemos notar
los detalles más pequeños, por ejemplo: el estado de las uñas de
nuestras manos.



La última bendición, la cuarta, es fundamental: Baruj
ata H', E-lokenu melej haolam, hamavdil ben kodesh lejol. ben or
lejoshej, ben Israel leamim, ben iom hashvii lesheshet iemei hamaase.
Baruj ata H', hamavdil ben kodesh lejol
" -
Bendito seas
Tú, H' rey del universo, que has separado lo sagrado de lo mundano, la
luz de la tiniebla, a Israel de los demás pueblos, el séptimo día de los
seis días laborables. Bendito seas Tú H', que distingues lo santo de lo
mundano -.



Después se bebe del vino y se apaga la vela. No se debe comer desde la terminación del Shabat hasta después de escuchar la havdalá.



Kidush levaná – Santificación de la luna nueva
El calendario hebreo, se calcula según los ciclos de las fases de  la luna (y de acuerdo con los ciclos de las estaciones) y Rosh Jodesh - el
comienzo de mes - que cae el día de la neomenia o  cerca de él. Es por
eso que decretaron una bendición especial, que se lee una vez por mes,
en la salida de Shabat - desde tres noches después de la neomenia.



Kidush levaná se recita entre el día tres al 15 del mes, con un minian y en el patio de la sinagoga, enseguida después de  arvit al finalizar el Shabat, antes de ir a la casa a realizar havdalá y la comida de melavé malka. Sefardíes
acostumbran bendecir solamente después del séptimo día del mes. Esta
bendición incluye un agradecimiento a D's, creador de las luminarias. De
aquí el simbolismo que se le acredita a todo el pueblo de Israel: así
como la luna a nuestros ojos va decreciendo, hasta que nos parece que se
ha extinguido y nuevamente,    nace de nuevo y va creciendo hasta que
se encuentra en su plenitud - así crece y se fortifica el pueblo de
Israel.



La oración de kidush levaná está compuesta por distintos capítulos de Salmos
y leyendas de nuestros sabios. En el centro está la bendición
propiamente: "Bendito seas Tú, H', rey del universo, que con tu palabra
creaste los cielos y todos tus ejércitos con un soplo de tu boca; Él les
dio decreto y tiempo designados, con el fin que no desvíen sus tareas;
ellos se regocijan y están felices cumpliendo los designios de su
Creador; su Creador es sincero y su obra es sincera; Él también ordenó
que la luna sea renovada mensualmente; una corona de gloria para
aquellos que fueron apoyados por D's, desde el inicio, porque ellos
serán renovados como ella y con el fin de glorificar al Creador por el
nombre glorioso de su reinado. Bendito seas Tú, H', que renuevas los
meses". Al concluirla bendición de la luna, después de Aleinu Leshabeaj y kadish de duelo, la congregación canta tres párrafos del poema Ke-l adon al col hamaasim, allí se alaba y se loa a los astros que creó el Santo Bendito.



De esta manera concluye la parte de "recordar" el Shabat, que está destinada a santificar y honrar el día del Shabat e irradiar de su fuerza y su peso peculiar al resto de los días de la semana.



Melavé malka – Escoltando a la reina Shabat.
De acuerdo con la tradición judía, el Shabat
es una reina que nos visita una vez en la semana a la que honramos al
salir, con una comida especial. Este banquete es llamado melavé malka acompañante de la reina - o seudat David hamelej - banquete del rey David. El nombre  melavé malka es claro. Pero, ¿de dónde ha  salido   la  expresión  de  seudat David  hamelej?



Nuestros sabios cuentan que David quiso saber cuando llegará  su
fin. "Dame a conocer el resto de mis días", le pidió al Eterno volvió y
pidió, hasta que el Santo Bendito respondió, que I moriría en Shabat.
Desde ese momento y hasta su último día de vida, el rey David acostumbró
realizar cada semana al finalizar  el Shabat, una comida de
agradecimiento por esa semana más de vida.



Para esta comida cantamos zemirot, cánticos especiales,  como amar H' lelaacov   - un cántico formado por veintidós versículos, ordenados alfabéticamente y cuyo final siempre es I el mismo: al tira avdí laacov  - no temas mi siervo laacov -.  Una parte de los cánticos son en memoria del profeta Eliahu.



¿Cuál es la relación entre el profeta Eliahu y la melavé malka? es una tradición que está basada en literatura mística dice, que en cada salida de Shabat el profeta Eliahu, heraldo de la redención,
recuerda los méritos del pueblo de Israel. Por eso lo  recordamos a
cada salida de Shabat y lo relacionamos a él, glorificándolo con
alabanzas.



Subestimación
...Yo recordaré Mi pacto con Iaakov y también Mi pacto con Isaac y también Mi pacto con Abraham (Levítico 26:42).



Un hombre joven con un severo problema de alcoholismo y drogas fue
admitido en el hospital para realizar un tratamiento. El paciente pidió
que se le hiciera una prueba de onda cerebral como parte de su examen y
explicó que le preocupaba que el uso del alcohol y drogas hubiese
causado daño a su cerebro. Le aseguré que no tenía razón para
preocuparse por ello.

Al día siguiente solicitó que se lo sometiera a pruebas psicológicas
para determinar si había sufrido daño cerebral. Otra vez lo tranquilicé
diciéndole que no tenía motivo para preocuparse. Al otro día inquirió
acerca de un examen de cerebro, otra vez preocupado por la posibilidad
de tener daño cerebral. Esta vez, sin embargo, se rehusó a aceptar mi
repetida afirmación. Entonces tuve una larga entrevista con este hombre,
durante la cual se tornó evidente que él no solo estaba temeroso por la
posibilidad de tener un daño cerebral, sino que ¡él realmente quería
tener daño cerebral! ¿Por qué? Porque entonces él podría decir, "No
esperen nada de mí. Simplemente déjenme continuar con mi uso de alcohol y
drogas. Yo estoy más allá de la ayuda, porque tengo dañado el cerebro".
Tener daño cerebral lo aliviaría de toda responsabilidad de ponerse
bien.



Algunas personas pueden ser motivadas, si bien inconscientemente,
para subestimarse a sí mismas y minimizar sus capacidades. Ser
conscientes de su verdadero potencial, las obligaría a realizarse hasta
el límite de sus capacidades. Engañarse uno mismo considerándose muy
limitado y creyendo que no puede lograr mucho, permite dejarse llevar
por el ocio y el estatismo sin mucha culpa.

En la porción de la Torá de hoy, leemos a cerca de las serias
consecuencias que seguirán al abandono de la Torá. Luego Di-s dice, "Yo
recordaré Mi pacto con Iaacov... y con Isaac... y con Abraham".



¿Cuál es la relevancia de esta declaración en el contexto de la amonestación?

El santo Shela explica que una persona es considerada responsable
proporcionalmente a sus capacidades. Nuestras acciones serán juzgadas
frente a un muy alto estándar. Nosotros somos los descendientes de los
patriarcas. Tuvimos antepasados quienes fueron personas santas,
cabalmente espirituales, y completamente comprometidas con la voluntad
Divina. Con tal linaje, las demandas sobre nosotros serán, más grandes
que si descendiéramos de personas menos espirituales.

Debemos percatamos de nuestras enormes capacidades. Toda persona
tiene un potencial que se aproxima a aquel de los ángeles (Salmos 8:6).
Debemos maximizar este potencial, y no engañarnos creyéndonos incapaces
de alcanzar un alto logro espiritual.



Adaptado de “Viviendo cada día”, Editorial Bnei Sholem



Behar-Bejukotai -”La profecía sobre el exilio y redención”
"Y recordaran Mi pacto con Iaakov " (Vaikra 26,42)



En la Parsha de la amonestación (tojaja) el Altmsimo describe los
sufrimientos que alcanzaran al pueblo de Israel si se desviara del
camino de la Tora. Al final, el texto relata la profecma Divina del
retorno del pueblo judmo al camino de la Tora, y que inmediatamente
después llegara la redención.

Sin embargo, la secuencia de los versículos plantea un interrogante.
Primero dice1: Y habran de confesar sus pecados, y los pecados de sus
padres . A simple vista se trata de un despertar en arrepentimiento,
luego de lo cual debe llegar la redención. Sin embargo, acto seguido, el
texto dice: 2 Y los traerá a la tierra de sus enemigos, y entonces es
que se doblegara su corazón taponado, y entonces habra de expiar sus
pecados . Solo a continuación dice:3 Y recordaran Mi pacto con Iaakov .
La mención del merito de los Patriarcas es lo que en la practica traera
la redención.



CONFESIÓN EXTERNA

De aquél deducimos que la confesión de los judmos por sus
transgresiones al final del exilio no sera suficiente para traer la
redención. Esta llegara solo luego de que: Se doblegara su corazón
taponado por medio de que el Altísimo los traiga a la tierra de sus
enemigos . E incluso con ello no sera suficiente para traer la
redención, y ella llegara solo en merito a los Patriarcas Abraham,
Itzjak y Iaakov.

El hecho de que el pueblo de Israel confiese sus pecados no
necesariamente es testimonio de un arrepentimiento verdadero, que
implica un cambio interior del corazón de la persona. El pueblo fue
vmctima de múltiples sufrimientos, y como consecuencia de la presión de
las calamidades el pueblo judío clama por su amargo destino y habla de
las transgresiones que causaron al exilio y su angustia, sin embargo aun
no hay aquí una transformación interior y una firme decisión de
abandonar la conducta pecaminosa y apegarse al Altmsimo.



EXPIACIÓN DE LOS PECADOS


Es por ello que esta confesión no genera siquiera que los pecados
sean borrados, puesto que no hay aquí un arrepentimiento real. La
expiación vendra por medio de que Y los traerán a la tierra de sus
enemigos , cosa que causara que entonces es que se doblegara su corazón
taponado . El quiebre del corazón y los sufrimientos llevaran a que
expíen sus pecados .

Sin embargo, la sola explicación de los pecados no es suficiente
para traer la redención. Para que llegue la redención es menester que
tenga lugar una transformación interior del corazón del pueblo. Exilio y
redención son dos estados opuestos. El Exilio es una expresión del
ocultamiento del Rostro (Divino) , mientras que la redención es el
reflejo de Me dirigiri (con Mi Rostro) hacia ustedes 4 la revelación y
brillo del Rostro Divino. Para ello se requiere la misma actitud por
parte del pueblo judmo: dirigir la cara hacia Di-s. Y esto no ocurrió
aún. Por ello, el Altmsimo traerá la redención, no en merito del pueblo
judío, sino por el merito de los Patriarcas.



COMIENZO DEL PROCESO


Sin embargo, la confesisn externa ya causa que el Altmsimo se
conduzca con los judíos con Su Misericordia. Como Rashi explica5 sobre
el versículo: Y los traerán a la tierra de sus enemigos - esta es una
buena actitud hacia Israel Yo no los dejo, sino que les envío Mis
profetas y ellos los hacen retornar bajo Mis alas .

El hecho en si de que la persona confiesa sus pecados con su boca,
aunque todavía no decidis en su corazsn retornar con Teshuva, ya tiene
un efecto positivo6, la propia palabra despierta al corazón. Y a su vez,
cuando alguien dice algo correcto con lo cual aun no esta totalmente
identificado, ya siente vergüenza, y eso mismo ya es positivo.

Por ello también el Se confesaran sus pecados es importante, y es
ahí donde comienza el proceso que finalmente traera la verdadera y
completa redención.



(Likutei Sijot tomo 27, pag. 207)










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